En un vibrante encuentro disputado en el estadio local, San Lorenzo de Ullum se llevó una merecida victoria ante su eterno rival, Marquésado, al imponerse por 2 a 1 en un clásico que tuvo momentos de gran tensión y emoción.
Desde el comienzo del partido, la igualdad se hizo patente en el campo. Ambos equipos mostraron un juego combativo y ordenado, aunque con destellos de nerviosismo. Sin embargo, el equipo local, San Lorenzo, pronto comenzó a encontrar su ritmo y a asociarse con mayor fluidez.
El avance constante hacia el arco del “Far West”, como suelen llamar a la portería visitante, fue in crescendo. La primera gran oportunidad llegó tras un tiro de esquina. Cristian Pérez, figura destacada del partido, se encargó de ejecutar el tiro que terminó en gol: donde la desvió Cristian Pinto, el gran central del local, que rompió la resistencia del arquero rival y marcó el 1 a 0.
El público estalló en jubilo, pero eso no frenó. La defensa, liderada por Pinto, Gil, Caroselli y Capillay, se mantuvo firme ante los embates de la visita. A medida que avanzaba el primer tiempo, la presión de San Lorenzo dio sus frutos nuevamente. En una jugada desafortunada para la defensa rival, el juvenil delantero Franco Aballay apareció en el lugar justo para capitalizar un rebote dentro del área y, con gran determinación, anotó el segundo gol para el local.
Su celebración fue efusiva, pero le costó caro: recibió la tarjeta amarilla tras quitarse la camiseta. A partir de ese momento, Marquésado despertó y se lanzó al ataque en busca de un descuento que les devolviera la esperanza. Ignacio González fue el encargado de darle vida al encuentro con un gol que llegó en los minutos finales del segundo tiempo, tras una jugada elaborada en la que mostraron su mejor repertorio. Sin embargo, el tiempo no fue suficiente y los intentos finales no lograron igualar el marcador.
La terna arbitral, compuesta por Enzo Gómez como árbitro principal, acompañado de Luciano Mesina y Daniel Olivera como asistentes, tuvo un desempeño destacado, manejando el partido con criterio y justicia.
Al final, San Lorenzo de Ullum se llevó los tres puntos y celebró su triunfo en casa, mientras que Marquésado se retiró con la incertidumbre de lo que podría haber sido su desempeño en este clásico vibrante. El fútbol, una vez más, demostró que, en un partido entre rivales, cada detalle puede marcar la diferencia.